Como cultivar fresas en maceta
- jennimorenoblog
- 12 abr 2021
- 3 Min. de lectura
Tras varios años cultivando fresas en maceta, hoy quiero compartir mi experiencia y explicar cómo y que hago para cultivar este delicioso fruto en balcón o terraza.
No importa si tienes una terraza mega grande o un pequeño balcón, las fresas se adaptan bien a cualquier lugar. Sólo tienes que asegurarte que reciban luz directa del sol unas 7 horas diarias. Si vives en un lugar dónde los veranos son muy cálidos deberás de darles un poco de sombra durante esos meses.
A mí me resulta más fácil y cómodo empezar comprando la planta o plantel. La siembra con semilla no es muy habitual para este cultivo.
La mejor época para plantarlas es a finales de invierno o principios de primavera, cuando ya no hay riesgo de heladas.
Las fresas necesitan un mínimo de 3 litros de sustrato por planta para que puedan llegar a reproducirse favorablemente. Si vas a plantar más de una planta en una maceta recuerda que su marco de plantación es de 20cm entre ellas. Por ejemplo, si tienes pensado poner un par de plantas en una maceta, deberás de escoger una que su volumen sea cómo mínimo de 6 litros y que entre ellas se cumpla la distancia de esos 20cm.
Para el sustrato preparo la mezcla de 50% fibra de coco, 20% sutrato universal y 30% humus de lombriz.
La fibra de coco nos aporta aireación y una gran retención de agua. Pero como no cuenta con nutrientes propios hay que mezclarlo con algún tipo de sustrato orgánico, yo utilizo humus de lombriz. De esta manera conseguimos una mezcla bastante nutritiva para la planta.
Cuando la transplantes, si esta tiene alguna flor o fresa es aconsejable cortarla. De esta manera la planta se asienta mejor y se dedica a enraizar y no a producir frutos. Te dará pena, pero no te preocupes porque tardará pocas semanas en aparecer nuevas flores.

En cuanto al riego necesitan humedad constante, pero no debes de encharcarlas. Para ayudar a mantener esa humedad puedes ponerle algún tipo de acolchado como paja limpia. Esto también te ayudará a que los frutos no estén en contacto con el suelo húmedo y se hechen a perder.
Será necesario el riego más abundante cuando la planta comience a dar frutos.
Abona una vez al mes añadiendo un puñado de humus de lombriz sobre la superficie de la maceta.
Conforme van madurando sus frutos ya puedes disfrutar de este cultivo, para mí uno de los más agradecidos. Fácil de cuidar y sin necesidad de disponer de un gran espacio para ello. Merece la pena disfrutar de ese sabor auténtico a fresa y sentir la satisfacción de haberlas producido una misma.

En cuanto a la reproducción, las fresas son fáciles de propagar, lo hacen ellas mismas mediante estolones. Generan largos tallos y crean una nueva planta en el extremo. Sólo tienes que fijar esta nueva planta en el suelo para que pueda enraizar. Una vez enraizado puedes cortar el tallo que va a la planta madre.
Con este sistema de reproducción, la temporada pasada, de una planta madre, pasé a tener once plantas nuevas.
Pero si no quieres plantas nuevas y prefieres centrar la planta madre en dar frutos, lo ideal es podar los estolones para que no llegue a reproducirse la nueva planta. De esta manera centrará todas sus fuerzas en producir nuevos frutos.
Aunque son plantas bastante resistentes al frío, si las cultivas en un lugar dónde se producen heledas en invierno, recuerda protegerlas del frío durante esos meses.
¿Te animas a cultivarlas esta primavera? Aún estás a tiempo.
Jenni
Comentarios